En las primeras horas de la víspera de Navidad, el tren nocturno de Londres a las Highlands escocesas desca­rrila, y con él, los planes festivos de sus viajeros. Atrapa­dos por la nieve en medio de la nada, los pasajeros solo se tienen los unos a los otros, y no todos llegarán a sus celebraciones navideñas. Mientras un asesino intenta acabar con los pasajeros uno a uno, la exdetective Roz Parker no puede resistirse a una última investigación. Sin embargo, un asesinato en una habitación cerrada es un rompecabezas formidable, incluso para el inves­tigador más experimentado. ¿Podrá Roz encontrar al culpable antes de que alguien más muera?

He leído este libro gracias a Laky de Libros que hay que leer y a las fantásticas lecturas conjuntas que organiza. Siempre es un placer participar en ellas. Me apunté porque no puedo resistirme a un thriller y, además, está ambientado, precisamente, en Navidad. 

Roz, nuestra protagonista, es una expolicía que viaja en tren hacia las Highlands para visitar a su hija Heather, que está embarazada, y a Ellie, su nuera. Todo se complica para ella por una serie de acontecimientos: Heather se pone de parto prematuramente, en el tren ocurre un asesinato y, además, descarrila. ¿Qué más puede ocurrir? Que Roz, por su antigua profesión, tenga que esclarecer los hechos y atrapar al asesino.

Sí, ya lo sé, estáis pensando en Asesinato en el Orient Express, y vais encaminados, pues está basada en esa novela, pero a lo moderno, con influencers, actores de moda e inclusión. A mí me ha gustado, la verdad, me ha resultado muy entretenida, pero es cierto también que he odiado a la mitad de los personajes (por no decir a la mayoría) y me ha pasado algo también muy curioso... Os explico: normalmente, en este tipo de lecturas, sospechas de todos y cada uno. Pues bien, me ha pasado todo lo contrario: no sospechaba de absolutamente ninguno.

Roz, la protagonista, sí que me ha gustado. Me ha parecido un personaje muy real, que se equivoca, que toma decisiones aunque sean erróneas, que tiene un pasado, que hace cosas mal... Creo que ha sido lo mejor de ella. Craig también me ha gustado, pero al final ha acabado chirriándome "lo que los une". No sé, mucha casualidad he visto yo ahí. El resto, ha sido un ni fú ni fá, exceptuando a Meg y a Grant, que me han resultado insoportables del todo. 

La ambientación sí me ha gustado, me habría encantado viajar en ese tren por en medio de las Highlands nevadas. ¡Menudo paisaje más ideal para Navidad! La resolución del asesinato, sin embargo, no me ha convencido, a pesar de que la autora hace mucha crítica social y contiene una sororidad tremenda. Un punto a favor también por ello. 

Un thriller navideño "normalito", entretenido y con una ambientación muy de estas fechas.