Zoey ha sido marcada: deberá abandonar su vida como humana y unirse a La Casa de la Noche, una escuela donde se entrenará para convertirse en vampyra. Eso si consigue superar el cambio, y no todos los marcados lo logran.

Pero Zoey no es la típica iniciada; es la elegida de la diosa Nyx, con todo el poder y el peligro que eso conlleva. En un mundo de intriga, criaturas cautivadoras y peligros cada vez más seductores, Zoey debe buscar en su interior el valor para abrazar su destino, o morir en el intento.

Hace años, esta saga fue todo un boom dentro de la literatura juvenil paranormal, y por ello no me extraña que Molino, sello de Penguin Random House, haya decidido hacer esta maravillosa reedición.

Esta primera parte, Marcada, es cierto que es muy introductoria, pero también es necesaria para ponernos en tesitura sobre estos vampyros, su manera de actuar, cómo se crean y dónde viven. A pesar de ello, no resulta un principio lento ni aburrido, sino que nos sirve para conocer muy bien a Zoey, la protagonista, y vivir con ella el inicio de su nueva vida como vampyro. Hasta ahora, era una adolescente normal que iba al instituto, con una madre poco cariñosa y un padrastro indeseable. Ahora, tras ser marcada, tiene que irse lejos de su familia, a otra escuela diferente donde acabará convirtiéndose en vampyra... si es que supera el proceso y no muere en el intento.

La nueva escuela me ha encantado. Es como estar dentro de Élite, pero con compañeros vampyros y otros, como tu, iniciados en ello. Todo es muy cool y con unas clases que ya quisiese yo haber tenido en el instituto. Sin duda, habría prestado más atención.

También me ha encantado la amistad casi instantánea que se ha formado entre ella, su compañera de cuarto y los amigos de esta útima. Aún a falta de seguir leyendo los siguientes libros, ya puedo decir que va a ser una de esas amistades literarias difíciles de romper y de olvidar.

En resumen, un comienzo de saga que promete, con unos vampyros algo diferentes.

Recomendado.