Entrevista a Marianna Nessi: `Escribiendo no tenemos vergüenza alguna´

¡Hola, Marianna! Lo primero, darte la bienvenida a Chica Sombra, siéntete como en casa. Cuéntame, ¿cómo es un día normal en tu vida?

Me levanto a las 5:45 de la mañana. Salgo a correr de 6:45 a 8:00. Me baño, desayuno y salgo a trabajar. Estoy unas cuantas horas en mi trabajo. Soy directora y entrenadora en un gimnasio de fitboxing. En los espacios libres me conecto en las redes sociales, bien sea para responder mensajes o hacer alguna publicación. Luego llego a casa para comer y me quedo el resto del día leyendo o escribiendo algo. Si hay alguna salida, paseo o cosas que hacer las hago, sino me quedo en casa. Al final de la noche siempre miro alguna serie o película en la tele antes de dormir. Y listo. Fin del día.

Publicas tu primer libro, A ver si entiendo. En él narras tu vida sexual con total libertad y sin tapujos (como debería ser la de todo el mundo) y cuentas cómo, con 13 años, despertaste sexualmente y descubriste que te atraían personas de tu mismo sexo. ¿Te ha costado mucho plasmar algo tan íntimo en el papel?

La verdad, no me costó escribirlo. Para mi escribir es como cuando estamos solos en una habitación: no tenemos vergüenza alguna. Hay libre pensamiento y no hay límites de expresión. Escribir esta historia me hizo sentir muy bien. Sentí que no tenía nada de que arrepentirme de mi pasado. Fue un reencuentro conmigo misma. Un reencuentro placentero. Me sentí orgullosa de haber crecido y haber aprendido. Pensé mucho en mi familia, pues me sentía agradecida de los valores que sembraron en mí desde muy temprana edad.

Antes de tu libro, contabas tus experiencias en tu canal de Youtube. ¿Cómo surgió?

El comienzo de A ver si entiendo en Youtube fue en una época en donde tenía mucho tiempo libre. Venía de haber estado un año entero con mucha actividad. Llegué a Madrid hace tres años y el primer año estuve estudiando un máster en Periodismo y, al mismo tiempo, trabajando como redactora en los informativos en Telemadrid. Luego acabó el máster y el contrato en aquel canal. Me sentí muy triste cuando tuve que irme de ese medio, pues conocí gente increíble y me dio mucha pena decir adiós. Estuve muy ansiosa y aterrada, pues no tenía ni idea de cuál sería el próximo paso. Ya estaba cansada de atravesar por tantos cambios en mi vida. Ya quería sentirme estable. Los siguientes días fueron muy vacíos y largos. Empezaron a invadirme los fantasmas del pasado. Era momento de prestar atención a mi vida personal y cerrar por completo ciertos capítulos que había dejado sin completar.

Por otro lado, tenía mucho tiempo usando las redes sociales. En mis monólogos solía hablar sobre la temática del amor propio. El valor que debemos darnos como seres humanos. Eso hizo que mi número de seguidores fieles fuera en ascenso, en su mayoría mujeres. Gracias a la conexión que hubo con esas personas se formó un nexo irrompible. Empezaban a contarme sus anécdotas personales con sus parejas y todos los problemas por los que pudieran estar pasando. Contaban con mi apoyo en cada inquietud. Me di cuenta de que las personas se sentían muy solas y confundidas.

Un día tomé el valor de sentarme en un sofá y empezar a contar cómo había sido mi vida  con respecto a mis relaciones amorosas. Comencé a relatar con pelos y señales lo que realmente se vive dentro de una relación con sus altos y bajos. Así fueron transcurriendo los capítulos, hasta sumar 47 episodios de una hora cada uno.

Me encanta ver cómo pretendes ayudar a personas LGTB desde tus propias experiencias. ¿Has sufrido mucho por culpa de la homofobia?

La verdad, no he sido víctima de la homofobia, quizás es porque no me expongo tanto como otras personas. Cuando digo esto me refiero a que llevo mi vida como una persona común y corriente. No voy por la calle diciendo cuál es mi preferencia sexual. Así como no creo que ninguna persona heterosexual lo haga. Esa es la manera de hacer de esta condición algo normal. No guardo rencor hacia las personas que se consideren homofóbicas, lo que siento es pena por ellas. Sin embargo, no las juzgo, pues seguramente es una consecuencia de la desinformación social o parte de su crianza. Pero el amor se entiende con amor.

Si algo sacamos en claro viendo tu canal, es tu pensamiento sobre el amor propio para poder amar luego a los demás. ¿Te ha costado mucho aceptarte tal y como eres?

No me ha costado aceptarme. Me costó despertar. Me costó tener la valentía de conocerme a mi misma. Tenía miedo al silencio. Me daba terror ese encuentro con mi interior y quizás no encontrar nada agradable. No obstante, el resultado fue maravilloso. Me descubrí y amé mi esencia. Aprendí a conocerme, a saber lo que me gusta y lo que no. Aprendí a amarme.

Locutora, influencer, escritora, youtuber... ¿Te animarás con alguna otra faceta?

Deportista también soy (Risas). Y hasta he sido redactora en informativos de la tele. He estudiado teatro. He hecho comerciales de TV. Me gustan los retos y las aventuras. Siempre estoy dispuesta a experimentar nuevas experiencias.

¿Me puedes contar algo sobre tus próximos proyectos?

De momento, dentro de poco publicaré un nuevo libro. En esta ocasión con catorce autores más. Un proyecto con unos colegas sobre un tema muy actual en la sociedad y, sobre todo, en estos momentos de pandemia. No puedo decir mucho, pero me parece que en diciembre ya lo podremos saber.

Para terminar, darte mil veces las gracias y hacerte una última pregunta: ¿eres feliz?

Indiscutiblemente, para mí la felicidad son momentos. Y debo agradecer que esos momentos son muy recurrentes en mi vida.