Mezolith Vol.2, o cómo amar la salvaje prehistoria

Titulo: Mezolith (Vol.2)

Autor: Ben Haggarty

Ilustrador: Adam Brockbanck

Editorial: DIABOLO EDICIONES

Fecha Publicación:  20 Abril 2018

Número de páginas: 96

Sinopsis:

Todos somos hijos de la madre de las manos rojas, sí, pero vosotros sois kansas… ¡Y el honor de un kansa está en juego! ¡Que no se diga nunca que os acobardasteis!

Hace 10 000 años, la tribu de los kansa vivía en la costa este de la Gran Bretaña de la Edad de Piedra, donde el peligro acechaba en cualquier lugar. El viaje de Poika hacia la madurez continúa paso a paso, envuelto en una red de cazas tribales, reuniones y banquetes determinados por el cambio de las fases de trece lunas.

Pero no está solo. La avaricia, la gula y el deseo danzan ante unos ojos que observan atentos desde las sombras.

Los límites entre los mundos reales e imaginarios se diluyen a medida que se nos revela más y más cosmología de los kansa en los sueños, pesadillas y belleza ancestral de .

Opinión personal de María Pizarro:

Hoy os vengo a hablar de la segunda parte de uno de los cómics que más me han asombrado últimamente a nivel de realismo casi fotográfico, a manos del dibujante Adam Brockbank. 

Diabolo Ediciones nos trae dos entregas de Mezolith, que cuentan ambas con dicho ilustrador y con el guion de Ben Haggarty. 

La unión de estos dos autores, uno dedicado al noble oficio de cuentacuentos, y otro dando su especial punto creativo, trabajando para películas como X-men, Stars Wars o Harry Potter, hacen de Mezolith la perfecta simbiosis artística entre historia e imagen.

El primer tomo nos pone en situación, contándonos la historia de una tribu que vivió hace ya 10.000 años en la era mesolítica, en concreto se centra en la vida de su protagonista, Poika. Este muchacho deseoso de enfrentarse a los distintos ritos característicos de su aldea para así poder convertirse en un hombre adulto, nos guía y muestra cómo vivían en esa época, y la importancia de escuchar las leyendas que los ancianos y chamanes de su tribu transmitían generación tras generación, a través de historias llenas de magia alrededor de una hoguera. 

La forma tan dinámica en la que está narrada la historia, tanto en la primera parte como en la segunda, mantiene el interés del lector a la vez que se deleita con las increíbles ilustraciones. 

En el segundo tomo, Poika es un poco más mayor y está en plena adolescencia, si ya es dura la vida de un adolescente en nuestra época, os podéis imaginar cómo debía ser en la del joven protagonista. Se sigue respetando ese halo de fantasía donde se mezclan cosmología, realidad, y leyenda, por lo que mantiene la chispa que hace de estos cómics unas ediciones ideales para coleccionista.

Brockbanck deja claro y patente su dominio sobre cualquier escenario. Tanto las escenas de día como en las de noche, son dignos murales que podrían contemplarse horas, por la multitud de detalles y calidez que transmiten. 

Mientras, las escenas de terror o con personajes fantásticos te llevan a otro registro completamente distinto, conociendo así un abanico de paletas muy dispares entre sí.

Considero que es muy difícil trasladar a un cómic, y más de una forma tan original, un tema tan estudiado como es la evolución de los territorios emergidos, y las gentes que lo habitaban en el contexto británico durante el Mesolítico. 

Una ficción que encierra la tradición de contar cuentos bien contados, para jóvenes y adultos. Un soberbio trabajo que recomiendo encarecidamente a los amantes del mundo salvaje y la mitología prehistórica.