Dejo las leyendas japonesas por un momento para traeros una historia de amores imposibles, tristeza y... fantasmas.
En 1849, en Altoona, Pennsylvania, la joven Anna Baker, hija del magnate del hierro Elias Baker, se enamoró de uno de los empleados de su padre. Anna, sabiendo que su familia jamás aceptaría a su amado por su origen humilde, se compró un hermoso vestido de novia para casarse con él en secreto.
En cuanto el orgulloso señor Baker se enteró del idilio, se valió de sus influencias e hizo que despidieran al joven y lo desterraran de la ciudad.
Anna, desolada, prometió que jamás se casaría si no era con el hombre que amaba. Los años pasaron, y Elias nunca permitió que la unión se hiciera realidad, obligando a su hija a estar soltera para siempre.
En cuanto su padre murió, Anna trató de buscar a su amado, pero ya era tarde. Vivió sumida en la tristeza y la más amarga soledad. Los sirvientes de la mansión decían que, durante las noches de luna llena, la veían bailando por la mansión, llevando el vestido de nupcias que con tanta ilusión había comprado. Finalmente, en 1914 falleció a una edad avanzada.
El vestido de novia fue usado por varias mujeres de la aristocracia, las cuales decían haber sido testigos de cómo se movía solo.
Con los años, la mansión Baker se trasformó en un museo, y el vestido de Anna volvió a su hogar. Lo expusieron en una vitrina de cristal y muchos de los visitantes aseguran haber visto el traje de novia moviéndose delicadamente, como si alguien lo llevara puesto y bailara en soledad... Esperando a su amado por toda la eternidad.
Fuentes:
- Guioteca
Imágenes:
- Amino
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Yo me casé con un vestido que me hicieron fusionando los de mi madre y mi madrina, muy Frankenstein ahora que lo pienso 😂 a lo mejor está embrujado 👻👹😁
ResponderEliminarBesitos 💋💋💋
Hola! Interesante historia. Gracias por compartirla.
ResponderEliminarUn saludo!
Una historia no tan aterradora como otras, pero igualmente interesante :-)
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