Teatro: Un obús en el corazón

Espectáculo de

Wajdi Mouawad

Dirección y adaptación

Santiago Sánchez

Producción

Ana Beltrán

Intérprete

Hovik Keuchkerian

Sinopsis:

Una llamada de teléfono en medio de la noche. Alguien, al otro lado de la línea, dice "ven". Wahab sale. Una ciudad extraña le espera. El frío le hiela las pestañas. Recuerda el calor de su país. ¿Quién ha telefoneado? ¿Qué está a punto de pasar? Aunque, puede ser que, para Wahab, todo comenzó cuando tuvo que abandonar su país, el calor, el día que olvidó la forma del rostro de su madre… el día que un obús le perforó el corazón.

El gran autor Wajdi Mouawad nos conmueve una vez más, nos plantea preguntas y golpea nuestras conciencias. Un montaje imprescindible que ha agotado las entradas todas las temporadas que se ha interpretado en Madrid y que está dirigido por Santiago Sánchez y protagonizado por Hovit Keuchkerian (actor que en cine ha aparecido en Alacrán enamorado y la saga Assassin's Creed).

Opinión personal de María Pizarro:

El frío por fin llega a Valencia, acompañado como viene siendo costumbre de sus constipados. De camino al Teatro Rialto, y con más capas que una cebolla, no olvidé meter en mi bolso dos o tres paquetes de pañuelos, ya no solo por el incipiente moqueo, si no porque sabia que la obra que me disponía a ver, me emocionaría.

Ya sentada en mi correspondiente asiento y con la luz tenue que presagiaba el comienzo de la obra, me sobrecoge la presencia de un hombre que camina por el patio de butacas del teatro, tranquilo, triste y sosegado. El actor Hovik Keuchkerian, ya en la piel de su personaje Wahab, sube al escenario.

La obra es un relato de la vida de una persona marcada por la guerra del Líbano. El autor de esta historia, Wajdi Mouwad, utiliza parte de sus vivencias personales tras el exilio, y cómo estas marcaron su existencia.

Un obús en el corazón muestra un viaje donde el público actúa como testigo de una historia narrada, que busca desesperadamente el perdón. Vemos cómo el protagonista no consigue olvidar sucesos del pasado, y no admite que las personas de su entorno actúen como si no hubiera pasado nada. Ahora, tras el anuncio de la inminente muerte de su madre enferma de cáncer, deberá enfrentarse de nuevo a sus miedos más profundos y, en definitiva, a la Muerte, que siempre le ha acompañado.

Impresionante interpretación de Keuchkerian, que conecta de forma directa con los asistentes. El actor suele sentarse a los pies del escenario y mira directamente a las personas, mientras narra las memorias del sujeto. Yo tuve la suerte de estar sentada en una de las primeras filas, y puedo decir que su mirada rezuma tanta verdad que te traspasa, dejándote petrificada en el sitio.

Obra dura que conmueve y que utiliza de una forma excelente la manipulación del tiempo a modo de flashback, como si de una película se tratara.